Los pueblos en Colombia viven cotidianamente en sus barrios, veredas y caseríos lasconsecuencias de un conflicto social y armado que se ha prolongado por más de cincuentaaños. Éste ha sido implementado sobre la base del despojo de los territorios, los derechos y ladignidad de nuestro pueblo. Junto a la historia de sangre de nuestro pueblo, se ha tejidotambién una justa historia de la resistencia, y desde ahí hemos forjado múltiples acciones paraalcanzar la paz con justicia social.
Los proyectos de extracción minera que se adelantan actualmente con la Colosa en el Tolima,la explotación ilegal de canteras en Bogotá, los parques mineros industriales de Tunjuelo,Usme, el Mochuelo, el proyecto hidroeléctrico del Sumapaz, la pérdida de los humedales de laSabana, la sobre-urbanización, las políticas de planeación y ordenamiento territorial, la nociónterritorial de “ciudad-región” para la Sabana y sectores aledaños, reproducen en nuestra regiónun modelo de país pensado para satisfacer los intereses de las multinacionales, modelo queatenta sobre los derechos de los pueblos, el territorio, la vida y la dignidad.
La persecución y criminalización de la juventud son una problemática cotidiana en barrios y municipios del centro del país, el tratamiento de la juventud como un problema de ordenpúblico lleva a la construcción de políticas principalmente represivas que refuerzan unimaginario social en donde la juventud y sus diferentes expresiones organizativas, artísticas yculturales son vistas como acciones delincuenciales ligadas al consumo de drogas y lacriminalidad.
Es en el marco de este panorama, en el que la construcción de la paz se pone de nuevo en el centro de las preocupaciones nacionales y empieza a ser concebida por los pueblos como lanecesidad de generar transformaciones estructurales a un modelo social, político y económicoque alimenta la injusticia, la miseria y en últimas la guerra. Con esa intención, desde el Congreso de los Pueblos, venimos insistiendo en la necesidad de encontrarnos para mandatarpaz con justicia social en los territorios y desde los distintos sectores del pueblo colombianoque hemos sufrido las consecuencias de este conflicto social y armado.
Por eso, hacemos un llamado a los procesos sociales y políticos, a indígenas, jóvenes, mujeres, sindicalistas, trabajadorxs urbanxs, iglesias y al conjunto de los pueblos de la región centro, aparticipar en la construcción de una agenda social de paz consecuente con las necesidades de laregión en el Congreso Regional de Paz a realizarse el 2 y 3 de marzo del 2013. Entendiendoque forjar la Paz para Colombia requiere de nuestro compromiso colectivo, invitamos alpueblo colombiano a que se sume en esta iniciativa por la Paz, haciendo escuchar las voces,reivindicaciones, anhelos y apuestas desde los territorios para seguir forjando una propuestaintegral de país para la vida digna en el Congreso Nacional por la Paz, a realizarse en abril de2013 en Bogotá.
CONGRESO DE LOS PUEBLOS. Uniendo voces, Juntando caminos, Organizando resistencias por la Construcción del Mandato para la PAZ con justicia social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario