Cada año al llegar este mes, la memoria de cada uno vuelve a
manifestarse, pero con una gran intensidad de esperanza a la lucha que dejaron
años atrás compañeros y estudiantes, cuyos sueños de transformar la
sociedad, fueron silenciados.
Es por esto que alrededor
de las 11:00 a.m se presentaron fuertes disturbios en la Universidad Nacional por la calle 45 y
en la Universidad Pedagógica por la
calle 72. Se realizaron como conmemoración del día del estudiante revolucionario
caído, cuya conmemoracion se da el 8 y 9 de junio.
La brutalidad policial se hizo presente con gases lacrimógenos,
que eran lanzados hacia el cuerpo de los manifestantes. Por otra parte la
información que proporcionaron los medios de comunicación fue muy poca, y solo se
reflejo el impedimento del tráfico.
Sin embargo, estas fechas brindan valentía y compromiso a los corazones rebeldes de cada
uno, demostrando que la memoria de los compañeros caídos en la lucha por una
mejor educación y sociedad, sigue latente todos los años. Son días que tienen una trascendencia
significativa e inmensa, que dan paso a
la voz fuerte y combativa de los miles de estudiantes que denuncian los
asesinatos cometidos por la fuerza policial
y militar, de cientos de compañeros que
por pensar por un mejor vivir, “merecen”
ser callados por las balas de la represión.
Tan solo queda decir:
Mi voz la que está gritando,
mi sueño el que sigue entero
y sepan que solo muero
si ustedes van aflojando
porque el que murió peleando
vive en cada compañero.
mi sueño el que sigue entero
y sepan que solo muero
si ustedes van aflojando
porque el que murió peleando
vive en cada compañero.
Por nuestros muertos ni un minuto
de silencio, toda una vida de combate.
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